El hotel está cerca de restaurantes, supermercados y cafeterías. Probamos Tatbak, un restaurante con comida sabrosa. Las habitaciones con instalaciones de cocina nos gustaron mucho. teníamos una caja fuerte, nevera y zona de comedor.

Me ha gustado un montón el hotel, era precioso y tenía un wi-fi muy bueno. El personal era eficiente y agradable, y todos sus servicios fueron buenos. Una ubicación excelente a la orilla del mar, en una zona tranquila. La comida del hotel estaba deliciosa y el Yekta Restaurant estaba cerca. Tuve una estancia súper agradable y volvería encantado;))

habitaciones con instalaciones de cocina. el interior era de estilo muy moderno. su ubicación era bonita en las proximidades de muchas cafeterías y restaurantes y de las principales atracciones turísticas y también de un metro.

La experiencia fue inolvidable. No he tenido ningún inconveniente. - Puedo recomendar este hotel a todos. - Un hotel muy limpio. - Una ubicación estupenda. - El personal es informativo y amable. - Las habitaciones tienen cocinas y facilidades de cocina, además de un lavavajillas.

El apartamento es espacioso y cómodo con una decoración elegante y moderna. Hay mucho espacio de almacenamiento y el personal es muy servicial. La ubicación es genial, con muchas opciones para comer y tiendas cercanas. El wifi es de alta calidad y la ducha es increíble. Perfecto para familias o para una escapada relajante.

Me gustó todo.

La ubicación de este alojamiento era ideal, ya que estaba cerca de tiendas, cafeterías y supermercados, lo que facilitaba encontrar todo lo que necesitábamos. Además, había dos centros comerciales cercanos y una estación de metro a poca distancia a pie. apreciamos el tamaño de la habitación y las instalaciones adicionales, como la cocina y la lavandería, que eran especialmente convenientes durante nuestra estadía prolongada. Los miembros del personal también fueron amables y serviciales, especialmente Saleh, quien siempre estuvo disponible para ayudarnos con cualquier pregunta o solicitud.

La limpieza y el mantenimiento de las toallas y sábanas dejaban mucho que desear, ya que tenían manchas y se notaba que se habían utilizado en exceso. Además, al no ser a prueba de sonido, podíamos escuchar todos los ruidos de las habitaciones vecinas, lo que dificultaba conciliar el sueño y descansar adecuadamente.